Sabiduría ancestral, semillas y lugares sagrados unen a los pueblos al buen vivir y a la armonía con la madre tierra…

Con la participación de más de 250 personas provenientes de diferentes regiones el Perú, se celebró el Watunakuy en Puruchuco, los días 1 y 2 de diciembre de 2017. Con el apoyo de la Plataforma de terre des hommes, Ministerio de Cultura – Puruchuco, DIGEIBIRA, la Universidad Cayetano Heredia y la red de jóvenes Redinjuv de Perú en el contexto del “Mes de Acción Global” (GAM – Global Action Month) de terre des hommes.

“… Aquí estamos tus hijos e hijas, Apu Puruchuco, para agradecerte y ofrendarte; pedimos tu fuerza, energía y alegría especialmente para que niños y jóvenes puedan caminar por los centros ceremoniales y el ‘Qhapaq Ñan’; por donde caminaron nuestros abuelos, y volver a hacerlo en estos nuevos tiempos…”

El Watunakuy es una iniciativa vivencial, colectiva y cósmica que nos permite recuperar, fortalecer e incrementar la diversidad de semillas, el respeto, el cariño y la relación sagrada con la Madre Tierra, el ánima de los lugares sagrados, la sabiduría ancestral y la espiritualidad.

El ciclo regenerativo de la vida se da de manera circular, el pasado vuelve a resurgir, se vuelve a vivir, pero en otras circunstancias y con otras personas (humanos, deidades y naturaleza). Es así que este WATUNAKUY, nos invita a retomar los caminos de siempre por los que la Madre Semilla, los “yachaq”, mayores, jóvenes y niños de manera comunitaria, vuelven a hacer “ayni” para recrear la vida, no solo para los pobladores de esta zona, sino para todo el mundo.

La ritualidad con que las “semillas sagradas” vuelven a sus caminos tradicionales hace que sean ellas las que conduzcan a sus hijos por costumbres milenarias de vivir la vida, heredando en ellos formas y modos de criar y hacerse criar, centrados en sentimientos y sensaciones chacareras.

Los humanos, al estar en este Watunakuy, también, como semillas, hacemos “ayni” entre nosotros. Compartimos y transmitimos fuerza, cariño, vida, respeto y ritualidad colectiva, que vitaliza nuestros corazones y renueva nuestro compromiso de seguir criando la vida para alcanzar el “Sumaq kawsay”.

¡Haylli Pachamama! ¡Halli Apunchiskuna!
Hasta el próximo Watunakuy…

para saber más: http://www.comunicacionesaliadas.com/watunakuy-encuentro-de-encarinamiento-con-la-semilla-para-vivir-bonito/