Ante la crisis global originada por la pandemia del COVID-19 miles de niños, niñas y adolescentes se vieron obligados a refugiarse en sus casas para evitar el contagio. Esto generó graves problemas en las familias más vulnerables del Perú donde más del 70% de la población sobrevive a partir de economías de subsistencia y trabajo informal. La seguridad alimentaria de millones de personas se vio afectada.

Esta situación sacó a relucir un problema estructural: El alimento del que dependen las ciudades proviene enteramente de las zonas rurales del país. Las ciudades peruanas no producen ni el 1% de su comida. Por ello, veíamos imágenes cotidianas de larguísimas filas y multitudes en los mercados, rompiendo los protocolos de seguridad, escases y alza de precios, cierre de mercados por casos de Covid, ya que éstos se convirtieron en el principal foco infeccioso.

Todo ello exacerbó el estrés de las familias pobres en las ciudades:

“Tenía que ir a hacer cola al mercado desde las 6am, encontraba más caro todo y más me daba miedo traer el virus a casa y contagiar a mis hijas” dice Sonia, madre soltera de tres niñas.

Ante ello y de manera espontánea, los adolescentes y jóvenes de la Red Infanto Juvenil por el Buen Vivir de Villa El Salvador, ComunArte, teniendo como base la experiencia de los huertos comunales, iniciaron con la siembra en casa. Tenían el consejo de abuelos y abuelas, quienes aún conservan el saber de la agricultura traído de sus pueblos.

“Ahora que estoy todo el día en mi casa he plantado varias semillas y están creciendo porque mi papá me ayuda, él sabe mucho porque tenía chacra en su tierra y  yo no sabía”.  Expresa Marycruz de 17 años

Esta iniciativa dio origen al Programa de educación intercultural y comunitaria “Huertas Familiares: Alimento y Cuidado de la Salud desde el saber tradicional en tiempo de COVID-19”, que tiene por objetivo generar prácticas de vida en las generaciones jóvenes que aseguren su bienestar presente y futuro, promoviendo su seguridad alimentaria en tiempos de emergencia.

Con el apoyo de tdh- Alemania, se entregará Kits de Siembra Urbana con semillas, tierra de cultivo y materiales básicos a más de 200 familias. Las familias tendrán un soporte educativo virtual a través de videos tutoriales con temas sobre las diferentes etapas del huerto como, compostaje, semilleros, cuidado natural de plagas, riego, además de cocina saludable y remedios tradicionales con plantas.

También, se entregarán kits para grupos de estudiantes por grado, con el compromiso del acompañamiento de sus maestros y maestras de las redes de educación intercultural que forman parte del Proyecto Regional Andino que lidera Pratec.

 “Todas nuestras clases son virtuales y siempre estamos pensando cómo hacer que sea más vivencial para que nuestros niños no se aburran, además el ministerio de educación está enfocando mucho en el medio ambiente y cuidado de la salud y un huerto enseña justamente eso” informa Giovanna, profesora de 4to grado de un colegio público.

El programa está dirigido a 200 familias vulnerables de Lima Sur. Los distritos beneficiados serán Villa El Salvador, Villa María y la zona de Laderas de San Juan de Miraflores, de esta forma se llegará a aproximadamente 450 niños y niñas mayores de 3 años, además de sus madres, padres y adultos mayores, que sumados serán aproximadamente mil personas.

Estamos viviendo una época difícil, por ello, asumimos  el reto de  transformar el problema en una oportunidad para un  verdadero cambio en la sociedad. Y de la mano de nuestras infancias.

 Hoy que la pandemia ha puesto en la mira los sistemas sanitarios en el mundo la consigna deber ser:

“Que tu medicina sea tu alimento, y tu alimento brote de tus manos”