En medio de esta pandemia generalizada que afecta a la salud de las personas, causando temor, muerte e inseguridad, que también ha afectado el sistema sanitario, el sistema educativo, la economía y todos los servicios; ¡Hoy se celebra el Día Mundial de la Tierra!
La ONU estableció el 22 de abril como Día Internacional de la Tierra, reconociendo que la Tierra y sus ecosistemas contribuyen a la satisfacción de nuestras demandas, principalmente de alimentación, medicina, energía, “recursos” para el desarrollo y que, actualmente, está siendo agredida por la sobre explotación y deterioro, situación que encuentra raíces en la cultura patriarcal, y en las sociedades capitalistas que promueven prácticas de despojo y desprotección de la naturaleza considerándola como un “recurso” y no como la vida misma.

En el contexto andino lo denominamos como el Día de la PACHAMAMA; en efecto, con el apoyo de tdh Alemania, estamos implementando desde las escuelas la agricultura familiar a través de la cual se vigoriza la recuperación de variedades de papas y maíces resistentes a sequías y heladas, así como el cuidado y conservación de las fuentes de agua; la Pachamama, es considerada nuestra Madre, a la cual la respetamos, honramos y festejamos. Con estas actividades se promueven actitudes positivas y se afianzan valores para lograr el buen vivir entre todos.

El 22 de abril, no es un día para celebrar, sino que nos avoca a la reflexión sobre el cuidado y la reconciliación con la Pachamama, los diversos problemas ambientales, y los daños que hemos ocasionado; consideramos que el Día de la Pachamama, es más bien una fecha y una oportunidad para promover que la sociedad en su conjunto (niños, niñas, adultos, intelectuales, autoridades, empresarios) reflexionemos y valoremos la diversidad biocultural que tenemos y que hemos venido perdiendo a causa del deterioro y la sobreexplotación de la naturaleza.
Reflexionemos juntos, para recordar que la Madre Tierra nos da la vida.
