Cuando escuchamos que se llevará a cabo un Foro sobre “Buenas prácticas de organizaciones latinoamericanas para prevenir y atender violencia hacia niñas, niños y adolescentes” nos viene a la memoria las cifras que emiten los organismos internacionales donde se señala que en América Latina y el Caribe, los casos de violencia de género se presentan de forma bastante heterogénea, así , por ejemplo en Bolivia, el 53,3% de las mujeres han sufrido violencia física o sexual; el 39,7% en Colombia; el 39,5% en Perú; el 32,4% en Ecuador; y el resto de países oscilan entre el 17% y 29%. O del último informe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), “El poder de decidir. Los derechos reproductivos y la transición demográfica”, donde se registra que en Ecuador, 111 de cada mil jóvenes entre 15 y 19 años han estado embarazadas. Le sigue en el índice Honduras (103), Venezuela (95), Nicaragua (92) y Guatemala (92) con las mayores tasas. Mientras que los países de la región con una menor tasa son Chile (41), Trinidad y Tobago (38), Curaçao (35), Aruba (35), Bahamas (32) y Martinica (20). Entonces, reflexionar o debatir sobre buenas prácticas para disminuir o aportar frente a esta situación es fundamental.

terre des hommes, en alianza con la Fundación Juconi, reunieron el 22 y 23 de octubre en Puebla – México, a copartes de Brasil, Chile, Bolivia, Colombia, El Salvador, México y Nicaragua, para poner en evidencia las buenas prácticas de las organizaciones participantes. Estas, mostraron a través de diferentes políticas, enfoques, estrategias, instrumentos metodológicos, investigaciones y otros como promueven una cultura de paz y disminuyen la violencia hacia los niños, niñas, adolescentes y jóvenes. Asimismo, expusieron que acciones como el futbol callejero, cuenta cuentos, comics, museos itinerantes, cajas de herramientas, mochilas del buen trato, teatro, y otros, se aporta a prevenir y atender la violencia.

Los asistentes coincidieron en algunos aspectos claves que se debería tener en cuenta para abordar esta problemática:

• Partir de los saberes, realidades y la cultura de las comunidades. Implementar las acciones desde y con ellos y ellas.
• Promover la participación niños, niñas y adolescentes en las intervenciones o las decisiones que se toman ante ellos.
• Atender a los individuos, familias y comunidades desde un enfoque sistémico e integración.
• Establecer redes y alianzas con otras organizaciones de la sociedad civil y gobierno.
• Reconocer la importancia de los aspectos lúdicos, como el juego como un elemento clave para el desarrollo de las personas en recuperación ante experiencias adversas.
• La importancia de la memoria histórica en los procesos de intervención en una comunidad para la concientización y evitar la repetición. Así también para establecer un enlace entre generaciones.
• Invertir en la formación, capacitación y profesionalización de los distintos actores de la comunidad a través de una propuesta político-pedagógica.
• La importancia que las acciones implementadas deban ser sostenibles y para ello aliarse con las comunidades y los gobiernos locales.
• Promover la trasferencia y escalamiento de las propuestas sobre cultura de paz y prevención de la violencia a políticas públicas con procesos de incidencia.
• La investigación como proceso para el mejoramiento de las intervenciones a realizar.

Si bien fueron días donde se compartió las buenas practicas, coincidimos que es el inicio de una tarea para terre des hommes, y la Fundación Juconi, ya que todos estos saberes y lecciones debe ser compartido más allá de los que estuvieron presentes. Se hace necesario – y se rescata esto de las mesas de trabajo – que se deben ver formas creativas y amigables para que más organizaciones y especialistas puedan acceder a esta información y así contribuir a la prevención de la violencia en los países latinoamericanos.

Como bien señalo Reina Isabel Velázquez, coordinadora del Programa Centroamérica-México de terre des hommes en el cierre del Foro “Nos vamos con el corazón encendido y las manos extendidas, creo que debemos aprovechar los espacios en cada uno de nuestros países, donde nos podamos sentar para producir cosas tan hermosas como aquí”! Entonces hermanos y hermanos tenemos mucho que hacer…