Jugar en cuerpo y alma en el barrio La Legua en Santiago, Chile, tiene un significado más amplio y complejo. En el barrio La Legua Emergencia – que tiene ese nombre por una intervención de los carabineros de Chile hace 17 años – niñas/os, adolescentes y jóvenes están en constante amenaza em un fuego cruzado. Balazos son una constante en el cotidiano del barrio y, por eso, el jugar no tiene un espacio propio. En los últimos tiempos, todavía, la situación presenta gran peora. “Antes a los niños les preocupaban las balaceras, la desconfianza entre los vecinos y sentían inseguros, pero ahora por primera vez nos encontramos con que tienen miedo a morir”, de acuerdo con Nury Gallardo, educadora de la organización La Caleta y vocera de la ROIJ.
Por lo tanto y de manera muy simbólica, en el sábado, 26.05, una protesta por el derecho de niñas/os de vivir y jugar em paz en La Legua fue organizada por la coparte de terre des hommes, La Caleta, una actividad de resistencia. Con sapatitos de niñas/os que participan de las actividades de la organización, la propuesta fue ocupar el espacio publico de manera lúdica y artística como símbolo de resistencia de la comunidad que no quiere más balazos o violencia en su barrio.
Como seguimiento de esa actividad, el sábado 30 de mayo, salieran en marcha organizaciones sociales, vecinos y vecinas de La Legua y barrios críticos para demandar a las instituciones gubernamentales políticas públicas pertinentes a la realidad de los territorios y sobre todo el derecho a la vida y a jugar de niñas/os. Salieran a las calles del centro de Santiago por un basta a los balazos, por la seguridad y por la no criminalización de la pobreza. El destino de la marcha: Ministerio de Desarrollo Social, en lo cual educadoras/es de La Caleta, bien como familias y niñas/os de La Legua entregaran a la Subsecretaria de Evaluación Social (Alejandra Díaz) y al Subsecretario de Servicios Sociales (Sebastían Villareal) un documento sobre la insostenible situación del barrio, que impide que niñas/os tengan el derecho de crecer y jugar em paz. En respuesta, recibieran las organizaciones un Plan con medidas propuestas por el gobierno del Presidente Sebastián Piñera.