Lo que critica el informe es que muchas armas pequeñas alemanas terminan en países en conflicto armado como Colombia y en países con graves violaciones de derechos humanos como Brasil.
Para no alimentar la violencia en países como Colombia o Brasil, existen ciertas restricciones en las políticas públicas en Alemania en cuanto a la exportación de armas pequeñas. Pero lo que documenta el informe es que estas políticas no son tan efectivas.
Uno de los ejemplos mencionados en el informe, es la exportación de pistolas Sig Sauer a Colombia via Estados Unidos. La legislación alemana impone restricciones para exportar armas pequeñas a Colombia por la existencia de un conflicto armado con actores armados que reclutan niños y niños y donde muchos menores de edad mueren por causa de la violencia generalizada. Por el otro lado, es relativamente fácil para empresas alemanas exportar a Estados Unidos dado que es un aliado y miembro de OTAN. Aprovechando de esta situación, un subsidiario de Sig Sauer en Estados Unidos importó armas de Alemania a Estados Unidos, diciendo que era el destino final de las pistolas, pero en realidad era para Colombia. Este caso fue descubierto y la empresa fue sancionada por la justicia alemana.
También, debido a los altos índices de violencia, el informe argumenta que debería existir restricciones más fuertes para la exportación de armas pequeñas a Brasil. Una preocupación destacada en el informe es la violencia contra jóvenes por parte de las fuerzas armadas. Solamente entre 2014 y 2018, un estimado de 22.000 personas murieron como consecuencia directa de operaciones de las fuerzas armadas en ese país, muchos menores de edad. Muchas de las unidades policiales y militares usan armas alemanas, por ejemplo, de Sig Sauer y de Heckler and Koch. Algunas de las armas alemanas también terminan en manos de grupos criminales y que resultan siendo usadas para crimines políticos. Por ejemplo, la fiscalía indica que Marielle Franco, un miembro del Consejo de la Ciudad de Rio de Janeiro muy reconocida, fue asesinada con un arma alemana (Heckler and Koch, MP5).
Thomas Mortensen, Coordinador Regional de tdhA para América Latina, comenta: “Como país, Alemania aporta mucho para un mundo menos violento y la construcción de paz en países como Colombia. Sin embargo, animamos al Gobierno alemán leer nuestras recomendaciones con detención y usar esta oportunidad para mejorar la legislación y sistemas de control para prevenir que armas alemanas sean usadas para quitar la vida a jóvenes y menores de edad, por grupos criminales o fuerzas policiales o militares que no respetan los derechos humanos”.
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